La sonrisa de un niño es una de las cosas más hermosas del mundo, pero a veces, esa sonrisa puede verse afectada por problemas de maloclusión dental, como la mordida abierta. Esta condición puede generar preocupación en los padres. Por eso, en este artículo, te explicaremos en detalle qué es la mordida abierta, cuáles son sus causas, las consecuencias que puede tener en el desarrollo de tu hijo y, lo más importante, cuáles son las soluciones más efectivas disponibles en la actualidad.
¿Qué es la Mordida Abierta?
La mordida abierta se produce cuando los dientes superiores e inferiores no se contactan al cerrar la boca. Esto significa que hay un espacio visible entre los dientes frontales superiores e inferiores, incluso cuando el niño muerde. Si bien puede parecer solo un problema estético, la mordida abierta puede afectar la capacidad de masticar, hablar e incluso respirar correctamente.
Tipos de Mordida Abierta:
Es importante distinguir los diferentes tipos de mordida abierta para determinar el tratamiento adecuado:
- Mordida Abierta Anterior: Es la más común y se caracteriza por la falta de contacto entre los dientes frontales superiores e inferiores.
- Mordida Abierta Posterior: Ocurre cuando los dientes posteriores (molares) no se tocan al cerrar la boca.
- Mordida Abierta Lateral: Se presenta cuando la falta de contacto se da en uno de los lados de la boca.
Causas de la Mordida Abierta en Niños:
Las causas de la mordida abierta pueden ser diversas y, en muchos casos, se combinan varios factores:
- Hábitos Orales:
- Succión del Pulgar o Chupete Prolongada: Este es uno de los factores más comunes. La presión constante del pulgar o chupete puede impedir que los dientes frontales erupcionen correctamente y provocar la apertura de la mordida.
- Empuje Lingual: Algunos niños tienen la costumbre de empujar la lengua contra los dientes frontales al tragar o hablar. Esta presión continua puede desplazar los dientes y causar la mordida abierta.
- Factores Genéticos:
- Herencia Familiar: La predisposición genética juega un papel importante en el desarrollo de la mordida abierta. Si alguno de los padres o familiares cercanos ha tenido este problema, es más probable que el niño también lo desarrolle.
- Anomalías Esqueléticas: Alteraciones en el crecimiento de los huesos maxilares pueden contribuir a la aparición de la mordida abierta.
- Problemas Respiratorios:
- Respiración Bucal: La obstrucción de las vías respiratorias nasales, ya sea por alergias, rinitis o amigdalitis, puede obligar al niño a respirar por la boca. Esta respiración bucal crónica puede alterar el desarrollo facial y dental, favoreciendo la mordida abierta.
- Otros Factores:
- Erupción Dental Anormal: Problemas en la erupción de los dientes, como la retención de dientes temporales o la presencia de dientes supernumerarios, pueden interferir con el cierre correcto de la mordida.
- Traumatismos: Golpes o lesiones en la mandíbula pueden afectar el desarrollo de los huesos y provocar la mordida abierta.
Consecuencias de la Mordida Abierta en Niños:
La mordida abierta puede tener diversas consecuencias negativas en la salud y el desarrollo del niño:
- Problemas de Masticación: La dificultad para cerrar correctamente la boca dificulta la masticación adecuada de los alimentos, lo que puede afectar la digestión y la absorción de nutrientes.
- Problemas del Habla: La mordida abierta puede interferir con la pronunciación de ciertos sonidos, como la «s», la «z» o la «t», lo que puede afectar la comunicación y la autoestima del niño.
- Problemas Respiratorios: En algunos casos, la mordida abierta puede contribuir a la respiración bucal, lo que puede provocar sequedad en la boca, ronquidos y un mayor riesgo de infecciones respiratorias.
- Problemas Estéticos: La mordida abierta puede afectar la apariencia facial del niño, lo que puede generar inseguridad y baja autoestima.
- Problemas de la Articulación Temporomandibular (ATM): A largo plazo, la mordida abierta puede causar estrés en la ATM, lo que puede provocar dolor, chasquidos y limitación de los movimientos mandibulares.
Diagnóstico de la Mordida Abierta:
El diagnóstico de la mordida abierta se realiza mediante una evaluación clínica exhaustiva por parte de un odontopediatra u ortodoncista. Esta evaluación puede incluir:
- Examen Visual: Observación de la oclusión dental y la relación entre los dientes superiores e inferiores.
- Historia Clínica: Recopilación de información sobre los hábitos del niño, antecedentes familiares y problemas de salud.
- Radiografías: Toma de radiografías panorámicas y cefalométricas para evaluar el desarrollo de los huesos maxilares y la posición de los dientes.
- Modelos de Estudio: Obtención de modelos de yeso de la boca del niño para analizar la oclusión en detalle.
Tratamientos para la Mordida Abierta en Niños:
El tratamiento de la mordida abierta dependerá de la causa, la gravedad y la edad del niño. Algunas de las opciones de tratamiento más comunes son:
- Terapia Miofuncional:
- Objetivo: Corregir los hábitos orales perjudiciales, como la succión del pulgar o el empuje lingual, mediante ejercicios y técnicas de reeducación muscular.
- Eficacia: Muy eficaz en niños pequeños, especialmente cuando la mordida abierta es causada por hábitos.
- Profesionales: Logopedas y terapeutas miofuncionales.
- Ortopedia Maxilar:
- Aparatología Removible: Uso de aparatos removibles, como placas de mordida o pantallas orales, para modificar el crecimiento de los huesos maxilares y corregir la posición de los dientes.
- Aparatología Fija: En algunos casos, se pueden utilizar aparatos fijos, como brackets o arcos extraorales, para lograr movimientos dentales más precisos.
- Edad Ideal: Niños en crecimiento, generalmente entre los 6 y los 12 años.
- Ortodoncia con Brackets:
- Objetivo: Alinear los dientes y cerrar la mordida abierta mediante brackets y alambres.
- Tipos de Brackets: Metálicos, cerámicos, de zafiro o linguales.
- Edad Ideal: Adolescentes y adultos jóvenes, una vez que han erupcionado todos los dientes permanentes.
- Cirugía Ortognática:
- Indicación: Casos severos de mordida abierta causados por anomalías esqueléticas que no pueden ser corregidas solo con ortodoncia.
- Procedimiento: Corrección quirúrgica de la posición de los huesos maxilares.
- Edad Ideal: Adultos jóvenes, una vez que el crecimiento facial ha finalizado.
- Nuevas Tecnologías y Enfoques:
- Microtornillos: Pequeños tornillos de titanio que se insertan en el hueso para proporcionar anclaje adicional y facilitar los movimientos dentales.
- Alineadores Transparentes: Alternativa estética a los brackets tradicionales, especialmente útil en casos leves o moderados de mordida abierta.
- Impresión 3D y Planificación Digital: Permiten una mayor precisión en el diagnóstico y la planificación del tratamiento.
Prevención de la Mordida Abierta:
Si bien no siempre es posible prevenir la mordida abierta, existen algunas medidas que puedes tomar para reducir el riesgo en tus hijos:
- Fomentar la Lactancia Materna: La lactancia materna favorece el desarrollo adecuado de los músculos faciales y la mandíbula.
- Limitar el Uso del Chupete: Si utilizas chupete, elige uno de forma anatómica y limita su uso a los primeros meses de vida.
- Evitar la Succión del Pulgar: Si tu hijo tiene este hábito, intenta corregirlo lo antes posible con ayuda de un profesional.
- Tratar los Problemas Respiratorios: Si tu hijo tiene alergias, rinitis o amigdalitis, asegúrate de que reciba el tratamiento adecuado para evitar la respiración bucal.
- Visitar al Odontopediatra Regularmente: Las revisiones periódicas con el odontopediatra permiten detectar y tratar los problemas de oclusión dental de forma temprana.
Conclusión:
La mordida abierta es un problema común en niños que puede tener diversas causas y consecuencias. Sin embargo, con un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado, es posible corregir la mordida abierta y mejorar la salud y la calidad de vida de tu hijo. No dudes en consultar con un odontopediatra u ortodoncista si tienes alguna preocupación sobre la oclusión dental de tu hijo.
